Las empresas están completamente seguras de una realidad: los clientes son la clave del éxito y de ellos depende el crecimiento y progreso de una compañía, por lo que siempre deben ser el objetivo de todas las estrategias de marketing.
De la comodidad y calidad de la experiencia de consumo que puedas proveer a tus clientes, depende mucho el impacto que tu marca deja a largo plazo y cómo se posiciona con respecto a la competencia y el marketing relacional es esencial para lograrlo.
Por ello, si lo que estás buscando es conocer más de este enfoque de negocios que persigue resultados a largo plazo, fidelización y ganancias para tu negocio y tus clientes, quédate con nosotros y descubre más al respecto.
¿De qué se trata el marketing relacional?
Un cliente feliz es un cliente fiel, y no solo a un producto en específico, que es importante, sino a todo el concepto que como marca puedas manejar, traduciendo esto en un consumo constante y una relación de favoritismo. Significa que, además, el cliente puede consumir todo lo que necesite de tu marca.
Ahora bien, mantener a los clientes contentos acarrea inversiones y un trabajo de marketing constante, donde la clave es ir monitoreando los avances de las estrategias diseñadas y revisar cuales son los cambios necesarios.
Todo este proceso, convencional pero igualmente importante, se conoce como el marketing relacional y consiste en orientar una amplia variedad de esfuerzos entorno a los clientes y el aprovechamiento de sus experiencias y deseos con la marca. Se trata, entonces, de hacer del cliente el eje de toda estrategia.
Y aunque el centro de todo es el cliente, lo ideal es que ambas partes se vean beneficiadas y que la empresa recupere, a través del retorno de inversión, gran parte de los esfuerzos que han sido realizados.
Se trata de una estrategia de negocios que constituye una amplia variedad de herramientas, cuya intención es generar y sostener relaciones de fidelidad y compromiso con los clientes o potenciales clientes, persiguiendo beneficios prolongados para ambas partes.
Es, entonces, la búsqueda y diseño de herramientas que están orientadas a captar clientes de la población objetivo, tomando como base un criterio de satisfacción de las necesidades determinadas en el grupo focal. La idea es lograr que las relaciones con el cliente se alarguen en el tiempo, mucho más allá de la adquisición del producto.
Enfoque en el cliente
Gracias al marketing relacional la marca logra convertirse en un aliado directo del cliente y le provee continuamente no solo productos y servicios sino experiencias, lo que significa que el usuario logre encontrar en la compañía las soluciones a una amplia variedad de problemas, no teniendo que recurrir a otras marcas.
A su vez, este enfoque de trabajo permite que estos clientes satisfechos traigan consigo nuevos clientes interesados en la experiencia de consumo que ofrece la marca. De esta forma, los clientes se transforman en embajadores de la propia compañía y traducen sus propias experiencias en publicidad.
La base del sistema de marketing relacional es el CRM, o Costumer Relationship Management que se encarga de evaluar constantemente el comportamiento de los clientes, sus necesidades y preferencias, tomando esta información como base para establecer cuáles serán las estrategias a utilizar para complacerlos.
Además, en los últimos años el marketing relacional se ha nutrido de las herramientas que representa el Inbound Marketing, una forma de trabajar el marketing que busca generar una relación de atracción constante hacia el exterior para hacer de la marca la opción más atractiva.
Te estamos hablando entonces de construir la marca, de mostrarla y perfilarla como la mejor alternativa para tus clientes y de generar autoridad en el mercado, convirtiéndote en el referente principal del público en el sector en el que te desenvuelvas.
¿Cuáles son los componentes del marketing relacional?
Este enfoque de trabajo de mercado está compuesto de las siguientes características:
Calidad de servicio
La calidad de los productos o servicios que se ofrecen es una clave del mantenimiento de las relaciones con el público; así, mientras mayor calidad ofrezcas, será mejor la experiencia de consumo de tu cliente.
Estrategias empleadas
La pertinencia y análisis de las estrategias que han de ser utilizadas es clave para alcanzar los objetivos. Si las herramientas de marketing que utilizas no están acordes con lo que el público es o necesita, difícilmente será exitoso el proceso y lo más probable es que se pierda la inversión.
Servicio al cliente
Aunque parece que todas las anteriores eran, de hecho, servicio al cliente, hay un sector específico que está enfocado en esto. Se trata de todas las herramientas y estrategias que se ponen en marcha para acompañar la experiencia de compra del cliente y que hacen la diferencia entre simplemente consumir el producto y consumir toda la marca y su concepto.
Aquí entran en juego la asesoría en las compras, el éxito del envió, la respuesta a cualquier duda y el acompañamiento en el proceso.
Importancia del marketing relacional
El marketing relacional es una oportunidad y, sobretodo, un enfoque que permite trabajar bases sólidas para la marca. Aquí no solo se trata de atraer los clientes y lograr las ventas, como puede ser en el caso del embudo de ventas, sino, también, de crear interacciones sólidas que se traduzcan en beneficios a largo plazo.
Con el marketing relacional la marca podrá contar con una base de clientes que a lo largo del tiempo, sean consumidores de sus productos, servicios y, sobretodo, de sus experiencias como compañía, siendo afines con sus valores más elementales.
Para el cliente, representa la oportunidad de relacionarse con una marca que sea capaz de responder a una amplia variedad de demandas, pudiendo encontrar diferentes necesidades en un mismo lugar y con los mejores estándares de calidad, lo que se traduce en comodidad para ellos, dada la familiaridad y cercanía con los valores de la empresa.
De esta manera, con el marketing relacional ambas partes encuentran una zona de confort de compras, beneficiándose y abriéndose paso en el mercado, generando autoridad en el mismo gracias al impacto positivo que la marca ha hecho sobre quienes han confiado en ella.
A través del marketing relacional, las marcas pueden potenciar las relaciones con los clientes, mejorar la experiencia de satisfacción de los usuarios, generar y sostener vínculos duraderos y mejorar sus resultados financieros, aumentando el retorno de inversión. Si deseas estos resultados en tu negocio, no dudes en ponerte en contacto con nosotros, sabemos cómo ayudarte.