Normalmente, una buena marca tiene perfectamente estructurado el imaginario de su branding, y comunica lo que hace su negocio y cómo lo hace, a la vez que establece los cimientos para ganarse la confianza y credibilidad de cara a sus clientes. Sin embargo, también es importante ser flexibles y saber adaptarnos a los tiempos que corren y los cambios importantes que puedan suceder en el mercado. Incluso las marcas más grandes y exitosas cambian con el tiempo, en especial, en tiempos de crisis. Por ese motivo es importante saber cómo cambiando algunos aspectos de tu marca pueden ayudarte a salir de un mal momento de forma exitosa. En este artículo te explicaremos las cuestiones básicas del rebranding y descubrirás por qué ahora podría ser un buen momento para que tu empresa se renueve.
¿Qué es el rebranding?
El rebranding, en pocas palabras, es el acto de cambiar la imagen corporativa de una empresa. Esto podría llevarse a cabo a través de la adopción de nuevos objetivos, cambio de naming o nombre de la marca, modificaciones en el logotipo y su tipografía, cambio de diseño estético, etc. Es decir, supone la modificación de algunos o todos los elementos que se encargan de identificar a una determinada marca.
El objetivo del rebranding es crear una nueva identidad para empresas o marcas ya establecidas en el mercado, con el fin de hacer un cambio en la percepción de esta y diferenciarla de sus competidores. No hay muchas razones que haga a las empresas realizar un rebranding, por lo que se sabe que la mayoría de veces se trata de un cambio relacionado con la necesidad de volver a conectarse con sus clientes, y por lo general, se distinguen dos tipos de rebranding: rebranding proactivo y rebranding reactivo.
Normalmente se recurre al rebranding proactivo cuando la empresa identifica una nueva oportunidad de crecer o aprovechar un nuevo mercado. Sin embargo en el rebranding reactivo, suele aplicarse en respuesta a una situación cambiante, donde el negocio se ve obligado a cambiar para sobrevivir.
¿Por qué deberías hacer rebranding a tu marca?
En el momento actual, a medida que el COVID-19 continúa interrumpiendo la actividad de las industrias de todo el planeta, muchas empresas grandes y pequeñas se encuentran en una situación de crisis donde es necesario recurrir al rebranding.
Es posible que pienses que un rebranding en este momento pueda ser arriesgado; quizás, creas que a los clientes puede no gustarles el cambio y la empresa pueda perder el reconocimiento de la marca por la que tanto trabajó. Sin embargo, meterse de lleno en el rebranding de tu marca también te invita a una reevaluación de la imagen pública y, por lo tanto, a un cambio de la percepción pública. Es decir, puede ser la crisis y la oportunidad de cambio lo que hagan a tu marca mejorar y avanzar en el mercado. Por esta razón, muchas empresas de las distintas industrias afectadas por la crisis sanitaria del coronavirus, han aprovechado el momento como una gran oportunidad para redefinir su marca y propósitos a conseguir. En el momento en el que empieces a investigar cómo aprovechar la mala situación actual para mejorar tu negocio, encontrarás nuevas vías y oportunidades para seguir adelante.
De este modo, un rebranding reactivo o proactivo puede ayudar a que tu empresa encuentre un terreno sólido sobre el que asentarse en una territorio aparentemente desconocido. Si no cuentas con un equipo de marketing en tu empresa, siempre podrás acudir a agencias de marketing especializadas que te ayuden a estudiar tu marca y plantear los nuevos pilares de su personalidad para atraer a nuevos clientes.
En el mercado, flexibilidad significa supervivencia
El rebranding puede ser una buena solución para una empresa durante y después de una crisis. Un buen rebranding llevado con éxito debe marcar una nueva dirección a la empresa, a través de la buena comunicación de la visión y el mensaje de la misma hacia sus clientes.
Tu empresa eres tú y tus clientes. Todos estáis en esto. Entonces, ¿por qué no escucharles a ellos y pedirles su opinión? Este podría ser un primer paso clave para determinar si es necesario un rebranding, y hacia dónde dirigirlo. Al preguntar a los clientes qué necesitan y esperan de tu negocio, podrás asegurarte de que tu estrategia de rebranding está alineada con las expectativas y necesidades de tus clientes, en vez de usar el cambio como una simple herramienta genérica en respuesta a la crisis. Que no te dé miedo preguntar: una buena marca es el reflejo de la relación entre los clientes y la empresa, y gracias a la información que te aporten tus clientes, puedes elevar tu negocio a algo más que un simple producto o servicio.
Un buen ejemplo de rebranding aprovechando la crisis actual, es el que ha llevado a cabo la guía de actividades de ocio “Time Out”, cambiando temporalmente su nombre a “Time In” para alentar a la gente sobre el distanciamiento y la necesidad de quedarse en casa, así como muchas cafeterías han decidido cerrar sus locales y montar pequeños puestos en la calle para ofrecer servicios mínimos y dar respuesta a las necesidades de sus clientes.
¿Cómo hacer rebranding?
A medida que el mundo se cierra, la clave para la supervivencia es abrir la mente e implementar acciones que den respuesta a las necesidades actuales y se vinculen a un propósito mucho más amplio que la venta. Si se hace de forma correcta, el rebranding proactivo puede ser una buenísima oportunidad para crecer, innovar y generar una relación de lealtad y confianza con tus clientes. En AdsPro podemos echarte una mano en algunas tareas para crear y desarrollar una identidad de marca que pueda perdurar en el tiempo, de modo que si necesitas ayuda para llevar a cabo una buena estrategia de rebranding, rediseñar tu sitio web y crear una buena estrategia de posicionamiento online, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.